No es ajena a mis parientes y amigos mi posición frente a la figura del gran maestro Daniel Barenboim. En mi articulo que mucho se difundió "El músico que se quedósin el pan y sin la torta", puse en relieve sus pésimos pensamientos sobre la política del Medio Oriente, y sus reconocidas y excelentes condiciones como pianista y director de orquesta de fama mundial. Sus esfuerzos por promover la paz a través de la música con la orquesta West-Eastern Divan que dirige, es loable. Lleva paseando por el mundo a un conjunto de jóvenes israelíes y árabes, que llena de goce los oídos de gente ávida de paz, demostrándoles a la vez cómo individuos cuyos gobiernos se encuentran en interminable litigio, pueden convivir en armonía. Yo tengo la gran dicha que mi nieta mayor Meirav, interviene en esa orquesta ejecutando el oboe. Actualmente la orquesta está llevando su mensaje paz por Europa. Ayer lo hizo frente al papa Benedicto XVI en su residencia de Castel Gandolfo.
En un descanso que, con gran misericordia, me otorga de vez en cuando el tratamiento médico al que estoy sometido, se me ocurrió revolver mi archivo de videos. Frente a uno de ellos volví a llorar hondamente emocionado. En ese corto video, parte de una transmisión televisiva hecha en España hace siete años, se ve a Meirav tocando su instrumento como solista, al lado de sus compñeros y bajo la batuta de Barenboim. Sin tardar subí el video a internet para poder compartirlo con mis queridos pariente y amigos.
Milo.
He aquí el video
http://www.youtube.com/watch?v=zDVxewuDx3Q
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